Cómo activar tus escápulas.
Las escápulas, omóplatos o paletillas, en su versión de andar por casa, son unos huesos de forma triangular que se encuentran en la parte alta de nuestra espalda. Son como nuestras “alas” y forman parte de la articulación escápulo-humeral, es decir, del hombro. Alrededor de ellas hay músculos que las conectan con las vértebras cervicales, dorsales, con las costillas y con los brazos. Así que, aunque son unos huesos bastante desconocidos para mucha gente, están implicados en un montón de movimientos de nuestro día a día.
Muchos de los dolores que tenemos en la parte alta de la espalda y el cuello vienen de esa zona, así como la mayoría de los problemas en la articulación de los hombros. Por lo tanto, si mejoramos la movilidad y la fuerza de la musculatura de nuestras escápulas, mejoraremos también esas dolencias y evitaremos lesiones más graves en el futuro.
Aquí te cito algunos de los beneficios de trabajar esta zona:
Alivio de puntos dolorosos alrededor de los omóplatos (puntos gatillo).
Mejora de la postura, reduciendo la chepa o joroba.
Aumento de la movilidad de los hombros.
Reducción de la tensión en la zona cervical y dorsal alta.
Mejora de la circulación en la parte alta del cuerpo.
Mejora de la capacidad respiratoria.
Así que si tienes o has tenido sensación de rigidez o puntos dolorosos en esa zona, escápulas aladas o tendencia a la hipercifosis (postura encorvada), prueba esta rutina de ejercicios cada mañana durante varios días para sentir sus efectos. También la puedes hacer como calentamiento antes de hacer deporte, especialmente si vas a trabajar el tren superior.
Te aconsejo realizar los ejercicios de forma lenta y consciente, poniendo la atención en los omóplatos y manteniendo todo el tiempo los hombros alejados de las orejas. Espero que te ayuden, ¡nos vemos en clase!